La conductividad eléctrica es la capacidad que tiene un cuerpo para conducir la electricidad.
Las unidades de medida de la conductividad eléctrica del agua más comúnmente utilizadas son las microSiemens/cm y las deciSiemens/m.
La conductividad en medios líquidos (disolución), está relacionada con la presencia de sales en solución, cuya disociación genera iones positivos y negativos capaces de transportar la energía eléctrica si se somete el líquido a un campo eléctrico. Estos conductores iónicos se denominan electrolitos o conductores electrolíticos.
La conductividad eléctrica se utiliza para determinar la salinidad (contenido de sales) de suelos y substratos de cultivo, ya que se disuelven éstos en agua y se mide la conductividad del medio líquido resultante.
El agua pura, prácticamente no conduce la corriente, sin embargo el agua con sales disueltas conduce la corriente eléctrica. Los iones cargados positiva y negativamente son los que conducen la corriente, y la cantidad conducida dependerá del número de iones presentes y de su movilidad.
Podemos decir que la conductividad eléctrica es la medida que utilizaremos para controlar la cantidad de nutrientes que debemos aportar a nuestras plantas. Midiendo la conductividad eléctrica sabremos si estamos poniendo demasiado fertilizante o nuestra planta necesita más.
Un aumento en la tempera, disminuye la viscosidad del agua y permite que los iones se muevan más rápidamente, conduciendo más electricidad. Este efecto de la temperatura es diferente para cada ion, pero típicamente para soluciones acuosas diluidas, la conductividad varía de 1 a 4 % por cada ºC.
Una correcta EC para las plantas de cannabis estaría entre 0,75 y 2 milisiemens (mS), pudiendo llegar hasta 3 milisiemens en tierra. Para cultivos hidropónicos o aeropónicos no se aconseja sobrepasar los 2,2 mS.
Cuando la EC es muy baja, se debe añadir fertilizante a la planta.
Cuando la EC es alta hay que hacer un lavado de raíces o lixiviado. Esto consiste en regar la planta sólo con agua, se suele regar hasta que el agua drenada por la planta se ve limpia.
Un medidor de EC sirve para medir el volumen o la fuerza total de los elementos en el agua o la solución.
La medición de la EC es sensible a la temperatura, y en los medidores de alta calidad se puede ajustar la temperatura de forma manual o automática, se debe tener en cuenta la temperatura para obtener mayor precisión. Para obtener una lectura precisa, hay que asegurarse de que la solución de elementos nutrientes y la solución madre están a la misma temperatura.
La vida de un medidor de EC, depende de su mantenimiento. Las sondas deben mantenerse húmedas y limpias en todo momento. No puede haber oxidación.
La EC la tendremos que medir:
– Primero en el agua que sale de nuestro grifo, ya que esta seguramente ya viene con una cierta concentración de sales, y después de añadir el fertilizante para la EC esté dentro los niveles.
– El agua que drena la maceta, para comprobar que las sales no se están acumulando en el sustrato.
– Cuando hacemos cultivos hidropónicos o aeropónicos, la EC la mediremos en el depósito utilizado para el riego. En este tipo de cultivo es uno de los factores muy importantes a tener en cuenta.
– En el sustrato que utilicemos, a fin de conocer la saturación que le hemos proporcionado al sustrato.
Al medir la EC hay que tener en consideración varios factores que pueden interferir en una lectura correcta:
. La exposición de la muestra al aire atmosférico, puede causar cambios en la conductividad, debido a pérdida o ganancia de gases disueltos, en especial el CO2. Esto es especialmente importante para aguas de alta pureza, con concentraciones bajas de gases y sustancias ionizables. Para evitar esto se debe tener una atmósfera inerte de nitrógeno o helio sobre la muestra.
. Sustancias no disueltas o materiales que precipiten lentamente en la muestra, pueden causar ensuciamiento en la superficie de los electrodos y causar lecturas erróneas.
. El ensuciamiento por sustancias orgánicas y corrosión de los electrodos, causan lecturas inestables o erróneas.
. El factor de correlación para obtener los valores cuantitativos de los sólidos totales disueltos sólo es válido cuando la muestra tiene un pH entre 5 y 8, a valores mayores o menores de pH, los resultados no serán confiables. Se tendrá que ajustar el valor del pH cerca de 7.0 utilizando un ácido o una base débil según sea necesario.
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