¿Cómo hacer mantequilla de cannabis en casa?

La famosa «cannabutter» es un ingrediente fundamental en la cocina cannábica y una elección popular entre los chefs herbalistas para incorporar el cannabis en sus recetas y lograr un efecto potente

Aunque existen diferentes métodos para hacer esta mantequilla especial, hoy te mostraremos uno de los más simples y efectivos.

Antes de comenzar, es importante tener en cuenta las precauciones necesarias, ser cuidadoso con las dosis y evitar quemaduras o efectos no deseados (recuerda que eres el único responsable de esto).

Ingredientes necesarios:

Agua, preferiblemente de baja mineralización.

Mantequilla.

Flores de cannabis o restos de poda.

Utensilios necesarios:

Cazos.

Batidora o utensilio similar.

Cocina con vitrocerámica o fogones.

Cuchara de madera.

Colador de malla.

Recipiente para el producto final.

Instrucciones:

Tritura el cannabis lo más fino posible para facilitar la liberación de los tricomas. Puede hacerlo manualmente con un molinillo u otros utensilios, pero si desea procesar grandes cantidades, puede utilizar picadoras o batidoras.

Seleccione una olla de tamaño adecuado en función de la cantidad de mantequilla que desee hacer y llénala aproximadamente 1/3 de su capacidad con el cannabis triturado. Luego, agregue agua y mantequilla en proporción de 1 a 4, es decir, por cada 250 g de mantequilla, agregue 1000 ml de agua hasta llenar 2/3 de la olla. Ten cuidado de no llenarla demasiado, ya que puedes desbordarte al hervir.

Enciende la cocina y calienta el agua a unos 65°C para minimizar la pérdida de THC y otros cannabinoides. Debes remover constantemente la mezcla mientras está al fuego y, después de 15 minutos, retírala.

Después del paso anterior, cuela la mezcla utilizando el colador de malla sobre un recipiente largo y déjalo enfriar.

Una vez que se haya enfriado, puede colocarlo en el refrigerador.

Después de varias horas en el frigorífico, verás cómo la mantequilla se ha separado del líquido residual. Con la ayuda de un cuchillo, haz un pequeño orificio para drenar el suero que se ha acumulado en el fondo (ese líquido se desecha, ya que contiene clorofila, restos vegetales y ceras).

Desmolda la mantequilla fácilmente pasando un cuchillo por el contorno, retirando la parte que estuvo en contacto con el suero y que puede tener tonalidades diferentes. Ahora puedes guardar este valioso ingrediente mágico en un recipiente para mantequilla.

La mantequilla de cannabis será un componente clave en muchas de las recetas que compartiremos en este blog, así que aseguraremos de guardar este post, ya que será indispensable.

Cabe mencionar que algunos prefieren realizar el proceso a más altas temperaturas para minimizar el tiempo de exposición al calor, pero en Agrobeta recomendamos que seguir el método mencionado es lo más efectivo para obtener resultados potentes.


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